El fútbol español se ha visto envuelto en un escándalo desde hace varias semanas. Jennifer Hermoso, jugadora de la selección nacional, denunció a Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), por besarla en la boca sin su consentimiento. El hecho ocurrió al finalizar el partido del mundial en Australia. Desde entonces las aguas no se han calmado y las consecuencias van desde acciones judiciales hasta la dimisión. Aquí te contamos todo sobre el controvertido caso.
Qué fue lo que ocurrió
El pasado 20 de agosto se celebró la final del Mundial de Fútbol Femenino en Sidney, Australia. España venció a Inglaterra 1-0. La emoción por el triunfo se palpaba en el ambiente. Rubiales estaba sentado en el palco VIP del estadio y junto a él se hallaban la reina Letizia y la infanta Sofía. Esto no impidió una primera acción poco decorosa de Rubiales: se agarró los genitales para celebrar la victoria. Posteriormente, Rubiales bajó a la cancha para la ceremonia de los premios. Cuando entregaban las medallas a cada una de las futbolistas españolas, Rubiales sujetó la cabeza de Jennifer y la besó en la boca. El momento fue captado por las cámaras y se viralizó. Ambos restaron importancia al suceso al inicio; sin embargo, ya la jugadora había dicho ese día en los vestuarios que no le había gustado el gesto de Rubiales.

Disculpas y denuncias
Al día siguiente de aquél beso, Luis Rubiales se disculpó. Lo hizo en un video que difundió la RFEF. De inmediato el presidente de España, Pedro Sánchez, declaró que una disculpa no era suficiente. Sus palabras fueron apoyadas por la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, quien exigió al directivo su dimisión. El 25 de agosto, la RFEF llevó a cabo una asamblea extraordinaria en la que Rubiales dijo enfáticamente que no renunciaría a su cargo. Volvió a disculparse, esta vez por tocar su genitales en el palco. Sobre el beso expresó que fue “mutuo, eufórico y consentido”, para luego asegurar que lucharía hasta el final. “‘¿Un piquito?’, le pregunté. ‘Vale’, me contestó”, dijo el presidente de la RFEF. El descontento fue general, pues se esperaba su renuncia.

Unión de deportistas
El sindicato de futbolistas del país ibérico, del cual Jennifer Hermoso es miembro, emitió un comunicado. En la misiva, 81 jugadores estamparon su firma y anunciaron que dejarían de jugar para España mientras Rubiales continuara en el cargo. La acción hizo que integrantes del cuerpo técnico de la selección renunciaran. También, la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) suspendió de manera provisional, durante 90 días, a Rubiales. Días después, el entrenador del equipo femenino de fútbol, Jorge Vilda (en la imagen), fue despedido.

Qué dijo Jennifer
Las primeras declaraciones de Rubiales hicieron que la futbolista escribiera un comunicado que difundió en Twitter. Allí, Jennifer dijo: “Me sentí vulnerable y víctima de una agresión, un acto impulsivo, machista y sin ningún tipo de consentimiento por mi parte”. Para recalcar lo expresado añadió: “Sencillamente no fui respetada”. La goleadora del equipo aseveró que las palabras del directivo fueron “categóricamente falsas y parte de la cultura manipuladora que él mismo ha generado (…) El beso no fue consentido ni de mi agrado”. Hermoso también denunció el acoso sufrido por la RFEF tras sus declaraciones por el beso. “La RFEF presionó a mi entorno (familia, amigos, compañeras, etc.) para que diera un testimonio que poco o nada tenía que ver con mis sensaciones (…) Actitudes como esta han sido parte del día a día de nuestra selección durante años”.

Acciones legales
La Fiscalía formulará una querella contra Luis Rubiales por coacción y agresión sexual. Para ello requirió de la denuncia formal de Jennifer Hermoso. La futbolista acudió a los tribunales y rindió sus declaraciones. La encargada de llevar la investigación es la teniente fiscal de la Audiencia Nacional: Marta Durántez. La Fiscalía expresó que: “a la vista de las manifestaciones públicas realizadas por doña Jennifer Hermoso, el acto sexual sufrido por la misma y llevado a cabo por el señor Rubiales no fue consentido”. Ahora solo falta que los tribunales de justicia evalúen la querella y decidan si es aceptada o si por el contrario terminará en un archivo. Si se admite, se designará un juez para el caso, que decidirá si se lleva a juicio o es desestimado. En España, el cargo por agresión sexual está penado desde una multa monetaria hasta cuatro años de prisión.

La renuncia de Rubiales
Aunque Rubiales aseguró que lucharía y que no iba a renunciar a su cargo, el pasado 10 de septiembre anunció oficialmente su dimisión como vicepresidente de la UEFA (del que estaba suspendido) y como presidente de la Real Federación Española de Fútbol. El técnico de 46 años envió un comunicado con la noticia a los medios de comunicación. “Insistir en esperar y aguantar no va a aportar nada positivo, ni a la federación ni al fútbol español”, expresó en la nota. “No quiero que el fútbol español pueda resultar perjudicado por toda esta campaña tan desproporcionada (…) Debo mirar adelante, mirar al futuro. Ahora hay algo que me ocupa con firmeza. Tengo fe en la verdad y voy a hacer todo cuanto esté en mi mano para que prevalezca”, indicó el directivo, quien además aseguró que sus hijas y su familia también han “sufrido los efectos de una persecución desmedida, así como muchas falsedades”.
